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miércoles, 29 de diciembre de 2010

Que qué me pasa?

No hablamos desde el holocausto en nuestro cuento y justo hoy aparecés preguntando qué me pasa...

La vida, eso me pasa...

Me pasa que no sé que sentir.

Me pasa que me equivoqué con vos, y hasta ahora lo proceso.

Me pasa que desde que te fuiste no dejo de prestarte pretextos para justificar tu falta de verdad en todo ésto.

Me pasa que acabo de superar el pánico que sentía al encontrarte culpable de partirme el corazón.

Me pasa que confié en vos, y que me siento defraudada.

Me pasa que ya no me queda corazón, no para vos.

Me pasa que estoy cansada de hablar de temas poco importantes para tragarme el grito de "¿Por qué?" que desea salir de mi garganta.

Me pasa que me acabo de encontrar culpable por idealizarte sin que vos lo pidieses.

Me pasa que sé que a vos no te importa tanto.

Me pasa que ésta noche no quiero fingir ni ser la ex comprensiva que acepta todos tus coqueteos.

Me pasa que no quiero que me preparés para tu regreso.

Me pasa que no estoy tan segura de querer formar parte de tu historia.

Me pasa... No, en realidad no sé que me pasa...

jueves, 23 de diciembre de 2010

Hasta acá...

Es oficial... Estoy hecha un pequeño desastre y ni siquiera tengo derecho de decirlo en voz alta... Hay noticias que te toman por sorpresa, la tuya es una de ésas.

Estoy ligeramente acostumbrada a que me rompan el corazón, sabés? Y no, no es por jugar el papel de víctima, que no es mi estilo... Es que así me ha tocado, y no me quejo, soy fuerte gracias a ello... Pero vos... Vos desde el principio has sido diferente... Y el ahora despedirme de vos debe ser muy diferente.

Es la primera vez que me rompen el corazón de manera tan caballerosa e indirecta. Y sí, te lo agradezco, agradezco el par de abrazos interminables, las miradas tímidas y las no tan tímidas, los mensajes de cortesía, las palabras de aliento, la temporada de ilusión, la sensación de que el amor de pareja no sólo existe sino que está al alcance de la mano...

Y ahora, porque te quiero te dejo ir... No porque no sienta que valga la pena, sino porque respeto y amo tu forma de pensar...